Consejos para formarse en gestión empresarial

Aunque hoy en día el camino del emprendedor atrae a muchas personas jóvenes deseosas por tener autonomía empresarial, no todos o todas están realmente preparados para llevar a cabo ese difícil camino. 

Es cierto que cada vez existen más iniciativas públicas o privadas al respecto, como promoción y difusión de espacios de coworking, cursos gratuitos de creación de negocios y asistencia a terapias de coaching, pero lo cierto es que hay una serie de conocimientos básicos que convendría aprender y asimilar por cuenta propia antes de tomar la decisión definitiva de crear nuestro proyecto personal. Si nos lo tomamos con calma y paciencia, podemos triunfar.

Naturalmente, un paso muy adecuado si se tiene la posibilidad y el tiempo para hacerlo es estudiar una carrera universitaria que resulte útil al respecto, como Administración y Dirección de Empresas. 

Por otro lado, existen cursos formativos relacionados con el marketing y la publicidad, uno de los pilares básicos del éxito empresarial. Hoy en día, gracias a la existencia del marketing digital y de sus herramientas de promoción de bajo coste, también es posible acceder a numerosos cursos online o presenciales de SEO, SEM, marketing de contenidos o creación web. 

Ese tipo de conocimientos, que además son relativamente baratos y pueden financiarse incluso con préstamos rápidos, sentarán las bases para llevar a cabo acciones debidamente analizadas y organizadas.

Por otro lado, es importante que los aspirantes a emprendedores entiendan que la formación no se acaba nunca. 

Aunque hacer cursos es prácticamente necesario, siempre se puede y se debería complementar dichos cursos con bibliografía especializada y de calidad, seleccionada para mejorar nuestra capacidad de gestión empresarial. 

En las bibliotecas y en las librerías técnicas tenemos múltiples monografías que profundizan en facetas específicas de la administración de un negocio, y deberíamos acudir específicamente a aquellos relativos a los aspectos que más nos cuesta aprender o aplicar. 

Podemos incluir el precio de los libros en nuestros microcréditos online, pero también es posible acudir a textos digitales, como trabajos o doctorados específicos sobre la cuestión. Elaborar una lista de recursos nos ayudará a decidir el mejor camino en nuestra formación.